En 2012, el gobierno de Changsha (Hunan, China) anunció la construcción del edificio más alto del mundo para ofrecer las máximas comodidades y servicios a los ciudadanos.

Dicho proyecto bautizado como 'Sky City' está en manos de la empresa de construcción Broad Sustainable Building (BSB), además, tenían la idea de construir el rascacielos en 90 días gracias a unos módulos prefabricados.

La entidad necesita 270.000 toneladas de acero para edificarlo y evitarían los materiales tóxicos como el plomo, amianto y aldehído. Por otro lado, sus principales características son la resistencia a los fenómenos extremos, tendría 202 pisos, albergaría a 30.000 personas y se crearía una 'ciudad' dentro del edificio.

Haciendo referencia al último rasgo mencionado, un 83% del espacio se destinaría al uso residencial, un 5% para un hotel y el 12% restante para hospitales, guarderías, escuelas, tiendas, instalaciones deportivas y supermercados.

La sostenibilidad también forma parte del proyecto para ahorrar energía. El aislamiento de 15 centímetros de las paredes y las ventanas con vidrio de cuatro capas mantiene la temperatura interior entre 20 y 27 °C, asimismo, la iluminación sería LED.

A pesar de que el proyecto recibió la aprobación de la construcción en noviembre de 2012, el coste del proyecto es de 1.460 millones de dólares y la duración de la obra se retrasó (en vez de 90 días, eran necesarios 120).

En julio de ese mismo año se realizó la ceremonia inaugural del proyecto y empezaron las obras de los cimientos, sin embargo, la megaconstrucción se paró por la falta de un permiso adicional.

Debido a la altura del edificio, la aprobación local no era suficiente porque necesitaba el visto bueno del gobierno nacional. Finalmente, llegaron a la conclusión de que la obra no podía continuar, debido a que el edificio se encontraba en la cercanías del Lago Daze (el hogar de 135 especies de aves en peligro de extinción).

Las autoridades chinas prohibieron las obras en el lugar donde se suponía que debía construirse Sky City, no obstante, BSB asegura que es capaz de realizar este proyecto y confía en que algún día lo hará. 

Un dato importante a mencionar es que China prohibió en 2021 la construcción de edificios de más de 500 metros de altura, suponiendo que Sky City tendría que construirse fuera de China.

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